20130812

Tres promesas

Puedes pedirme que dibuje paisajes con cielo verde, pastos azules, montañas flotantes y ríos de cera. Puedes pedirme que me escape al monte y coma mermelada de tierra. Puedes pedirme que recite poemas confusos en lenguas inexistentes, que vague desnudo sin nombre como alma en pena.

Puedes pedirme que le robe al mimo su silencio. Puedes pedirme que muela a golpes La Piedad, El David y la estatua de Atena, que arañe y desgarre la Mona Lisa y me coma los Zapatos Viejos. Que muerda las pirámides aztecas hasta hacerlas polvo, que queme los instrumentos de toda orquesta.

Puedes pedirme que robe los anillos de Saturno, el tridente de Neptuno, que rapte al tiempo a Io, Calixto, Ganímedes y Europa. Que coma vidrio, vista tinieblas, que haga que la lluvia caiga de la tierra hacia el cielo, retardar la primavera.

Puedes pedirme que venda mi alma por cantidades irrisorias de bienes fatuos, que regale mis creencias a cualquier religión monoteísta de moda. Puedes pedirme que peque en cualquier continente sin importar la condena. Puedes pedirme que cometa infamias que arranquen al mismísimo Borges de su tumba para que reescriba la Historia Universal.

Puedes pedirme que cave con las uñas un túnel que cruce cordilleras. Puedes pedirme que enmudezca para siempre, que escape de tu vista, que evada por siempre tu trayectoria so pena de destierro. Puedes pedirme que calle lo que siento, que ahogue mis principios, que te mienta. Puedes pedir que me abandone a la locura, que deje mi oficio para entregarme a la irracionalidad y negar mi propia naturaleza. No importa que todo aquello vaya en contra de mi voluntad, no importa que esto me obligue a alejarme de ti entre llanto seco enmudecido, rendido y derrotado, cumpliendo mi promesa.

Puedes pedirme todo salvo tres cosas, que no quede duda de ellas. Arrancarte de mi memoria, debajo de mi piel está tatuada tu esencia. Proferir hacia ti, mujer adorable, cualquier clase de odio. Y tal vez podrás hacerme jurar dejar de amarte, pero jamás dejará de latir por ti mi corazón para negar tu existencia.

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Filipo Rviz y el Taller del Cuento Ciudad de Bogotá 2008

Sobre esta página

Filipo Rviz / Felipe Gómez abre este espacio en abril de 2008 cuando hizo parte del Taller de Cuento Ciudad de Bogotá 2008.
Dirigido por Carlos Castillo Quntero
http://www.tcuentobogota.blogspot.com

Desde entonces esta Bolsa de Ideas reune los relatos preliminares.


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